La pasada Semana Santa de 2014 se cumplían diez años de la primera salida bajo palio de María Santísima de Lágrimas y Favores. Ese día José Miguel Moreno cumplió su sueño de ver a la Niña de San Juan en su propio trono bajo palio, la Sagrada Imagen a la que siempre acompañó desde pequeño cada Domingo de Ramos en su Rosario de la Aurora. “Y eso que yo creía que nunca lo vería. Es el broche que me ha podido dar Fusionadas en los más de 50 años que llevo como hermano porque pensaba que no lo vería terminado”, recuerda el artista vinculado desde pequeño a nuestra Cofradía y uno de los impulsores del cambio que ha dado esta sección en las últimas décadas.
Ese 4 de abril de 2004 no solo salía su Virgen bajo palio -su ojito derecho junto a Ntra. Sra. del Mayor Dolor-, sino que él también firmaba como diseñador y bordador todo el conjunto procesional. Ese día salió completa la orfebrería del trono e incluso bordados el frontal y la trasera del palio. Sin olvidar que la Dolorosa estrenó saya, toca, corona y puñal, todo obra de José Miguel Moreno, cuyo taller por aquel entonces estaba en Postigo de San Juan. “Ese día estaba en una nube y fue tal cantidad de gente la que me abrazó y felicitó que no recuerdo mucho. Creo que debe ser como cuando te dan un Oscar… ¡o seguro que mejor!”, explica una década después.
Eso sí, no lloró. Las lágrimas las dejó para el cuarto año bajo palio, junto a su hija en San Juan, cuando al ver el encierro realmente fue consciente de todo lo que había puesto en marcha junto con un grupo de hermanos convencidos de un reto que no se antojaba nada fácil. “Fue un cambio muy grande, porque de verla procesionándola en esas anditas a estar radiante en su trono y llegar a donde está ahora ,con ese patrimonio de tanta calidad en tan poco tiempo es muy gratificante. Aunque ha habido mucho trabajo detrás y al principio pensaba que nos costaría muchos años . Había mucho por hacer y era demasiado dinero. Es verdad que tuvimos algo de ayuda, pero fue un esfuerzo titánico de rifas, lotería, verbenas… de sacar dinero de donde no había para seguir el proyecto”, detalla el actual Vocal Vestidor y asesor artístico de nuestra Hermandad.
El sueño lo ideó y dio forma junto con un grupo de jóvenes hermanos que pronto consiguieron el respaldo de fusionados veteranos como Rafael Palomo. Jose Miguel primero diseñó las barras de palio y luego llegaría la peana. Y siguió dibujando -se formó en esta disciplina en la Escuela de Artes y Oficios de San Telmo- diseños de arbotantes, cabezas de varal… Sin olvidar todos los bordados. Así hasta completar en solo 14 años una pieza que en el mundo cofrade apodan “el joyero de San Juan” y cuyo manto, también firmado al completo por él, puso el broche de oro a todo el conjunto en 2010.
– ¿Con qué momento de estos diez años se queda?
– Por el paso por la calle Carretería el primer año que Lágrimas y Favores realizó el recorrido oficial. Recuerdo que la Virgen entró triunfalmente en la calle entre una nube de incienso maravillosa. Y entró en la Tribuna de los Pobres en la que no cabía un alfiler con la gente sin parar de aplaudir.
El último Rosario de la Aurora en el que María Stma. de Lágrimas y Favores salió en andas fue 2003. En 2004 estrenó el trono con la orfebrería completa y las bambalinas frontal y trasera del palio así como la Gloria (la Anunciación). Poco después llegarían los laterales y el techo del palio. Y finalmente el conjunto lo completó el manto en 2010, en el que aparece la Cruz de Malta, por la sede canónica, y el Ave María, escudo de la sección.
Ester Requena Pino
Vocal de Publicaciones