La imagen fue bendecida por el obispo Ramón Buxarrais y la formación musical la fundaron Fernando Casquero Salcedo y Antonio Domínguez Ruiz.

Las Cofradías Fusionadas están de enhorabuena por dos aniversarios que se encuentran muy unidos: los 40 años de la bendición de la Virgen del Mayor Dolor y la creación de la banda de cornetas y tambores de la hermandad radicada en la iglesia de San Juan. Este templo fue el escenario, el sábado el 25 de octubre de 1980, en el que Ramón Buxarrais, entonces obispo de Málaga, procedió a la bendición de Nuestra Señora del Mayor Dolor, una talla salida del taller del imaginero Antonio Dubé de Luque que vino reemplazar a la imagen que se había quemado en el incendio declarado el 21 de julio de citado año en la iglesia de San Juan.

La Virgen lució el manto de la Sacramental de Viñeros, llevó la corona de Santa María del Monte Calvario y se situó sobre la peana de la Virgen del Amor, enseres prestados por la carencia que tenía Fusionadas a causa del referido incendio. Los padrinos de la bendición fueron los benefactores, Juan González Muñoz y María Montiel Gómez. En la solemne misa actuó la coral Santa María de la Victoria, dirigida por el padre Manuel Gámez. En esa época el hermano mayor de Fusionadas era Marcelino Aguilar Damián, mientras que el párroco de San Juan era Amalio Horrillo Coronil.

Al día siguiente, se celebró el tradicional rosario vespertino por las calles de la feligresía de San Juan, que tuvo una solemnidad especial y llegó hasta la plaza del Obispo. Se interpretó hasta una saeta. Otro hecho destacado fue que en ese rosario se produjo el estreno de la recién creada banda juvenil de cornetas y tambores de Fusionadas, que acompañó musicalmente a la Virgen del Mayor Dolor en el cortejo.

La banda fue fundada, en septiembre de 1980, por Fernando Casquero Salcedo y Antonio Domínguez Ruiz, que era secretario de Fusionadas. Como recuerda Fernando Casquero, la banda se formó con jóvenes de la parroquia de San Juan y con otros ya experimentados provenientes de bandas juveniles de la época. Su presentación se llevó a cabo en el antiguo conservatorio de María Cristina el 13 de marzo de 1981. A la entidad musical se incorporaron Enrique Pastor Sánchez y Rafael Martínez Rodríguez, que fue nombrado vocal delegado de la banda ante la cofradía, función que llevó a cabo hasta los años noventa. Su labor fue reconocida al ser nombrado hermano distinguido de Fusionadas.

Fernando Casquero explica que uno de los objetivos que persiguió la dirección de la banda fue recuperar las partituras para cornetas y tambores compuestas por «insignes músicos» como Alberto Escámez, Bernardo Puyuelo o Pascual Zueco Ramos para cofradías malagueñas, pero que ya que no se interpretaban en Málaga, aunque sí en otras provincias andaluzas. De ese modo, indica Casquero, se pudieron rescatar marchas como ‘Virgen de la Paloma’, ‘Jesús El Rico’, ‘Virgen del Mayor Dolor’, ‘Virgen de la Paz’, ‘Cristo de la Buena Muerte’, ‘La Soledad de San Pablo’, ‘La Dolorosa’, ‘El Ángel’, ‘Espiración’ y ‘Virgen de los Dolores, entre otras.

La banda de Fusionadas recibió un espaldarazo con la llegada de Antonio García Molina, «gran impulsor de la música de cornetas y tambores en Málaga», según asegura Fernando Casquero. Otro acontecimiento singular fue el cambio de uniforme. Los componentes de la banda de Fusionadas estrenaron casaca roja y lucieron un casco de alpaca coronado por plumas encarnadas. El nuevo atuendo se lució por primera vez en el pregón de la Semana Santa de Málaga de 1994, que pronunció en el Teatro Cervantes el abogado Leopoldo García Sánchez, que era el hermano mayor de Fusionadas. Tres años más tarde, la entonces alcaldesa de Málaga, Celia Villalobos, ejerció de madrina del recién creado escuadrón de clarines y timbales de Fusionadas, bajo la dirección musical de Juan de Dios Candil.

La banda de Fusionadas, además de participar en las tres ediciones del certamen de bandas de cornetas y tambores de Andalucía, celebradas en la plaza de España de Sevilla, traspasó las froteres nacionales. Así, acudió al Festival de Flandes, para actuar en la Catedral de Gante, y al Festival de Arte del Mediterráneo en Ostende (Bélgica). Aparte de ganar premios y ser reconocida por su calidad, la banda grabó un disco en 1998 bajo la dirección técnica de los hermanos León Jaime, precisa Fernando Casquero, quien pone en valor el arte musical de compositores como Arturo Cáceres, Francisco Florido, José Fernando Jurado, Francisco Segovia, Miguel Ángel Gálvez y David Perez, todos integrantes de la banda de cornetas y tambores de las Cofradías Fusionadas.

Casquero no deja en el olvido que la banda que él fundó junto a Antonio Domínguez «fue pionera en acompañar a un sagrado titular con sus sones, sosteniendo el paso del trono hasta la finalizacion de la marcha» (antes solo iba un músico tocando el tambor detrás de cada imagen). Asimismo, hace hincapié que la banda de Fusionadas sobresalió por «la recuperación de un estilo y por la forma de interpretar las partituras históricas».

• Autor: Ángel Escalera
• Fuente: DiarioSur
• Fecha: domingo 25 de octubre de 2020